Patrona de nuestra Diócesis
Pquia: “Ntra. Sra del Carmen-
Iglesia Catedral- Diócesis de Cruz del Eje.
Del 7 al 16 de Julio de 2013
Querida
Comunidad
“Anunciamos a Jesús, ayer, hoy
y siempre”,
este lema que acompaña todo nuestro Año Jubilar Diocesano, es sin dudas,
también, la vocación que hemos recibido por el bautismo: ser anunciadores de
Jesús y, anunciadores, en todo tiempo y todo el tiempo. En todo tiempo, es
decir en mi estado actual: niño, joven, adulto, anciano... estudiante, novio/a,
esposo/a, consagrado/a; todo el tiempo, significa que debemos dejar que el
anuncio impregne toda nuestra existencia, toda nuestra vida, todo nuestro ser;
desde las decisiones más fundamentales que debemos tomar, así como los diálogos
cotidianos, los pasatiempos y responsabilidades asumidas con compromiso y
honestidad.
“Anunciamos a Jesús, ayer, hoy y siempre”
es la misión encomendada a nosotros como Iglesia y el Señor nos regala la
gracia que nos acompaña para responder a su pedido. Gracia patente en este Año
Jubilar Diocesano, en esta Año de la
Fe y en la próxima beatificación del Cura Brochero, en la
persona del Papa Francisco; como así, también, en la próxima ordenación
diaconal de Juan Pablo. Todo esto nos “toca” muy de cerca y nos invita a una
respuesta agradecida ante tantos “mimos” de Dios para con nosotros. Respuesta
agradecida que no será más que, procurar anunciar a Jesús, siempre.
“Anunciamos a Jesús, ayer, hoy y
siempre” es nuestro anhelo como comunidad parroquial y, en este tiempo
de gracia de novena, queremos renovar este deseo misionero de anunciar a quién
nos fuera dado del vientre bendito de la Virgen María ,
invocada por nosotros con el dulce nombre de Madre del Carmen: Jesús: rostro
humano de Dios y rostro divino del hombre. Anunciadores al estilo de Brochero,
que es su “vida pobre y entregada” dio testimonio alegre, obrando siempre al
estilo de Jesús, el Pastor Bueno, pedimos, también, su intercesión y como él
ser “salidores del evangelio” yendo a la búsqueda y al encuentro de aquellos
hermanos nuestras que viven en “periferia” geográficas y existenciales” y que
precisas de la Buena Nueva
que los incluye, los rescata y los salva.
Invitados a celebrar
juntos este tiempo de gracia y a la espera del Encuentro en torno a las mesas
de la Palabra
y del Pan de Vida; les dejo mi bendición.
P. Diego
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